Pocas actrices pueden presumir de haber debutado con uno de los cineastas más provocadores y polémicos de la actualidad. La primera película de Mia Goth sería la controvertida Ninfomanía, en la que interpretó a una joven de 15 años que se involucra en una destructiva relación con la protagonista, Joe (Charlotte Gainsbourg).
Tomaría unos años para que la carrera de Mia Goth comenzara a despegar en verdad. Sin embargo, con Suspiria de Luca Guadagnino –remake del clásico de Dario Argentino–, la actriz comenzaría a hacerse un lugar en el género de terror, el que ha sido uno de los más fructíferos para su carrera. Aquí interpreta a Sara Simms, una de las estudiantes en una prestigiosa escuela de danza que esconde un siniestro secreto.
Con la legendaria cineasta sa Claire Denis, Mia Goth realizó High Life, una película de ciencia ficción junto a Juliette Binoche. Aquí vemos un panorama bastante desolador, con un grupo de criminales sentenciados a muerte que acceden a una alternativa: viajar en una expedición espacial experimental hacia un agujero negro. A bordo, sin embargo, la desolación, represión sexual y las maquinaciones de una científica dan lugar a actos perversos.
Para los seguidores más ávidos de la actriz por su prolífica trayectoria en el terror, verla en un drama de época –adaptado de Jane Austen, además– podría sonar descabellado. Sin embargo, junto a Anya Taylor-Joy como la protagonista titular, Mia Goth brilla en el rol de Harriet, y redondea un elenco de jóvenes promesas británicas junto a Josh O'Connor (Lazos de vida).
Añadir el nombre de Brandon Cronenberg a su lista de créditos sin duda contribuyó a consolidar a Mia Goth como una scream queen luego de haber incursionado en la Trilogía X de Ti West (más al respecto, en breve). Sin embargo, en Muerte infinita (Infinity Pool) su papel no le requiere tanto gritar como reír y ser una auténtica perturbada, en una historia de terror y ciencia ficción donde el dinero, la corrupción y la plena decadencia moral de los ricos degradan la vida humana hasta sus niveles más ruines.
